Castro de Troña: Ventana al pasado gallego

El Castro de Troña se erige como una ventana abierta al pasado de Galicia, un enclave histórico arraigado en la parroquia de Pías, perteneciente al Concello de Ponteareas, en la rica provincia de Pontevedra. Este destacado yacimiento arqueológico, cuyos orígenes se remontan a unos seiscientos años antes de Cristo, se sitúa en la cumbre del monte Dulce Nombre de Jesús. Desde esta altura de 225 metros, el castro domina con majestuosidad el Valle del Tea, evidenciando una ubicación que ha jugado un papel crucial en su función defensiva a lo largo de los siglos.

Fotografía: Pío García

El Castro de Troña: Un viaje al pasado de Galicia

La importancia del Castro de Troña no radica solo en su antigüedad, sino también en su contribución al entendimiento de la cultura castreña en el noroeste peninsular. La elección de su emplazamiento no fue casual; la visibilidad de todo el valle y su posición elevada sobre el entorno inmediato le conferían ventajas defensivas significativas frente a posibles invasores. Además, esta ubicación estratégica facilitaba el control de las rutas terrestres en la región y aseguraba un acceso eficiente a los recursos hídricos del cercano río Tea, esenciales para el sustento de la comunidad que habitaba el castro.

Castro de Troña

La estructura del Castro de Troña revela un complejo sistema de fortificación, compuesto por murallas, fosos excavados en la roca viva y parapetos. Estos elementos no solo demuestran la sofisticación técnica alcanzada por sus constructores, sino también una clara intención de protegerse de las amenazas externas. La disposición de las murallas, con un torreón orientado hacia el este, y las terrazas que se extienden hacia el oeste, muestran una planificación cuidadosa y una adaptación inteligente al terreno.

Los trabajos arqueológicos llevados a cabo en el Castro de Troña han permitido desenterrar no solo estructuras habitacionales y defensivas, sino también una rica colección de objetos que testimonian la vida cotidiana de sus antiguos habitantes. Entre los hallazgos se encuentran cerámicas pintadas, ánforas romanas, hachas de filo curvo y petroglifos de gran valor simbólico, como el famoso petroglifo serpentiforme en posición heráldica. Estos objetos no solo enriquecen el legado cultural del castro, sino que también ofrecen pistas sobre las interacciones comerciales y culturales con otros pueblos de la antigüedad.

Castro de Troña

Además de su relevancia histórica y arqueológica, el entorno del Castro de Troña destaca por su valor etnográfico y paisajístico. El camino que asciende hacia la cima, flanqueado por un viacrucis que conduce a la ermita del Dulce Nombre de Jesús, añade una dimensión espiritual y cultural a la visita. Este recorrido, junto con las romerías que se celebran en el lugar, mantiene vivas las tradiciones y fortalece el vínculo entre el pasado y el presente de la comunidad local.

Castro de Troña

Una fortaleza en la cumbre

La configuración arquitectónica del Castro de Troña destaca por su estructura defensiva meticulosamente planificada, que incluye una prominente acrópolis y una amplia terraza que se extiende hacia el oeste. Este asentamiento, caracterizado por su complejo diseño defensivo compuesto por un profundo foso tallado directamente en la roca del monte y dos robustas murallas reforzadas con parapetos, refleja la avanzada ingeniería y el creativo ingenio de sus antiguos constructores.

Castro de Troña

La primera muralla, dotada de un distintivo torreón que mira hacia el este, junto con la segunda muralla que rodea la terraza, evidencian un sofisticado sistema de fortificación diseñado meticulosamente para asegurar la defensa y la supervivencia de la comunidad que habitaba el Castro de Troña. Estas fortificaciones no solo tenían un propósito defensivo sino que también jugaban un papel crucial en la organización social y económica del asentamiento, controlando el acceso y gestionando eficientemente los recursos.

Castro de Troña

La presencia de estos elementos defensivos subraya la importancia estratégica del Castro de Troña en la antigua Galicia, funcionando como un bastión de protección y un centro de actividad para sus habitantes. La habilidad para construir tales estructuras, adaptándose al terreno y maximizando su eficacia defensiva, resalta la destreza y la previsión de una cultura profundamente enraizada en su entorno y consciente de las necesidades de su comunidad.

Un descubrimiento histórico

La fascinación por el Castro de Troña experimentó un notable incremento en el siglo XX, particularmente después de que la construcción de una nueva vía revelara la presencia de antiguas estructuras murales y valiosos objetos. Este descubrimiento propició el inicio de una serie de excavaciones arqueológicas a finales de los años 20, lideradas por los destacados investigadores Luis Pericot y Florentino López.

Castro de Troña

Estos trabajos arqueológicos permitieron sacar a la luz desde ánforas de procedencia romana hasta piezas de cerámica finamente decorada, subrayando la riqueza cultural del asentamiento. Entre los hallazgos más significativos se encuentran dos petroglifos de excepcional valor: uno con forma soliforme y otro con representación serpentiforme, asumida en lo que se denomina «posición heráldica», siendo este último especialmente relevante por su conservación en las proximidades del Castro de Troña.

Castro de Troña

Estos petroglifos no solo enriquecen el patrimonio histórico del castro, sino que también ofrecen una ventana única a las creencias y expresiones artísticas de sus antiguos habitantes, consolidando aún más el valor histórico y cultural del Castro de Troña como un enclave clave en el estudio de la prehistoria y la antigüedad en la región gallega.

Excavaciones y hallazgos

El Castro de Troña ha sido el foco de numerosas investigaciones arqueológicas a lo largo de los años, que han desempeñado un papel crucial en desentrañar los misterios de este asentamiento histórico. Desde el inicio de su restauración en 1981, dirigida a preservar y destacar su importancia, hasta las meticulosas excavaciones que desvelaron la existencia de hasta 30 estructuras habitacionales evidenciando rasgos de proto-urbanismo, el Castro de Troña ha ofrecido una perspectiva enriquecedora sobre el modo de vida de sus ocupantes desde el siglo IV a.C. hasta el siglo I d.C.

Castro de Troña

Estos esfuerzos arqueológicos no solo han permitido recuperar una amplia variedad de estructuras residenciales y defensivas, sino también objetos cotidianos y ceremoniales que revelan las complejas dinámicas sociales, económicas y culturales de sus habitantes. A través del análisis de estos hallazgos, incluyendo herramientas, utensilios de cocina, adornos personales y elementos arquitectónicos, los investigadores han podido reconstruir un cuadro vívido del Castro de Troña, iluminando aspectos fundamentales de su organización social, prácticas económicas y rituales religiosos, lo que convierte a este sitio en un valioso recurso para entender la prehistoria y la antigüedad en Galicia.

Un legado más allá de la arqueología

Además de su valor arqueológico, el Castro de Troña se encuentra en un entorno de alto valor etnográfico y cultural. Elementos como el viacrucis hacia la capilla del Dulce Nombre de Jesús y el camino real hacia el Castillo de Vilasobroso enriquecen la experiencia de visitar este emblemático lugar, ofreciendo un puente entre el pasado y el presente de la región gallega.

Castro de Troña

El Castro de Troña no es solo un sitio arqueológico; es un eslabón vivo que conecta la Galicia contemporánea con sus raíces ancestrales, una invitación a explorar la riqueza histórica y cultural de esta región. Para los amantes del turismo y la historia, una visita a este castro ofrece una inmersión única en el legado de los antiguos pobladores de Galicia, sus técnicas de construcción, su vida cotidiana y su estrategia de defensa ante los desafíos de su época. En cada rincón de este lugar, se respira la historia y se revive el espíritu indomable de los gallegos ancestrales, haciendo del Castro de Troña un destino imprescindible para quienes buscan comprender la profundidad y riqueza del pasado de esta tierra.

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