La actividad agraria propia del municipio rural ha dejado su huella en construcciones tradicionales como hórreos, molinos y hornos. De ellos nos quedan muestras en Vilameá, donde se conserva un magnífico conjunto de hórreos.
La actividad agraria propia del municipio rural ha dejado su huella en construcciones tradicionales como hórreos, molinos y hornos. De ellos nos quedan muestras en Vilameá, donde se conserva un magnífico conjunto de hórreos.