Hotel Alixares, descansar a los pies de la Alhambra

El Hotel Alixares está ubicado a las puertas de la Alhambra, ofreciéndonos una solvente opción de alojamiento de cuatro estrellas a tiro de piedra de este impresionante conjunto histórico Patrimonio de la Humanidad, que tenemos que visitar sí o sí durante nuestra estancia en Granada. 

Además, no olvidemos que la antigua fortaleza musulmana fue erigida en este punto por su posición dominante sobre la ciudad, circunstancia que a día de hoy convierte al Hotel Alixares en una apuesta estratégica desde la que descubrir el resto de los atractivos de Granada. 

Viajando con Pío

Comodidad y confort, con todos los servicios

Por supuesto, su privilegiada ubicación no es la única baza del Hotel Alixares para satisfacer las necesidades de sus clientes. Ofrece habitaciones cómodas y exclusivas, con una decoración elegante y suelo de parqué. Todas ellas están equipadas con nevera, televisión, teléfono, aire acondicionado, caja fuerte y secador de pelo. El hotel dispone de habitaciones dobles, triples y familiares, también de habitaciones adaptadas para personas con movilidad reducida. Para terminar, si queremos una estancia algo más lujosa podemos contratar su junior suite, con bañera de hidromasaje y una terraza con preciosas vistas sobre la ciudad. 

Hotel Alixares, descansar a los pies de la Alhambra
Hotel Alixares, descansar a los pies de la Alhambra

El resto de las instalaciones del Hotel Alixares también están a la altura, ofreciéndonos un escenario perfecto para reponernos tras un día de exploración. En el restaurante los chefs del hotel preparan platos sabrosos y variados, apostando firmemente por productos locales de primera calidad. Podemos disfrutar de su cocina a través del menú o comer a la carta, aumentando nuestras opciones durante el verano con barbacoas al aire libre. En todo caso, todo nos sabrá mejor si lo disfrutamos en la hermosa terraza, con idílicas vistas a los alrededores. 

Hotel Alixares, descansar a los pies de la Alhambra

Destaca asimismo la piscina del recinto. Rodeada de jardines y abierta desde Semana Santa hasta mediados de octubre, nos ofrece la posibilidad de refrescarnos a nuestra llegada al hotel tras las visitas del día. O mejor aún,  de planificar una jornada más calmada, pedir una toalla en recepción y disfrutar del sol en las hamacas del solarium que acompaña a la piscina. 

Instalaciones para todo tipo de eventos

En el Hotel Alixares tienen experiencia organizando todo tipo de eventos, desde reuniones de trabajo hasta bodas y comuniones. Disponen de salones completamente modulares que permiten adaptarse a las necesidades concretas de cada evento, dotados de equipos tecnológicos (megafonía, proyectores y equipos informáticos… ) y de servicios de restauración personalizados.

Hotel Alixares, descansar a los pies de la Alhambra
Hotel Alixares, descansar a los pies de la Alhambra

Pero si hay un evento que cuidan con especial mimo son las bodas, con un equipo que acompaña a los novios en cada decisión, trabajando cada detalle para que el día sea perfecto. El hotel dispone de suite nupcial, degustación del menú, precios de alojamiento especiales para invitados… Y lo mejor de todo, nos da la oportunidad de celebrar nuestra boda con la Alhambra como telón de fondo. 

Granada, mucho más que la Alhambra

Una de las grandes ventajas del Hotel Alixares es que nos permite llegar al recinto de la Alhambra a primera hora sin necesidad de madrugar demasiado. Con un poco de suerte podremos disfrutar sin aglomeraciones de este histórico conjunto monumental, descubrir con calma sus patios, palacios y jardines, que llevan siglos dejando huella a sus visitantes. 

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Pero Granada tiene muchos recursos más allá de su buque insignia. No podemos dejar de recorrer con calma su centro histórico, prestando especial atención a la catedral, una de las obras cumbres del renacimiento Español. Nos sorprenderá su inusual fachada, obra de Alonso Cano, pero también la Capilla Real anexa que guarda la tumba de los Reyes Católicos. 

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Merece la pena acercarse al barrio de Albaicín, el más antiguo de la ciudad. Allí descubriremos un urbanismo enrevesado, ejemplo único de la arquitectura hispano-musulmana medieval, con callejuelas de casas blancas ideales para perderse o disfrutar del animado ambiente que presentan hoy en día.

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Algo más lejos del centro, otra visita recomendable es el Monasterio de la Cartuja, ejemplo destacado del barroco español, con un sobrio exterior que contrasta vivamente con su exhuberante decoración interior. Otra visita menos conocida pero igualmente interesante sería la Abadía de Sacromonte, con las Santas Cuevas donde se descubrieron los restos de San Cecilio, patrón de la ciudad. 

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Son tan solo algunas de las opciones que ofrece la ciudad, que disfrutaremos especialmente sabiendo que al final del día podremos reponernos en las confortables habitaciones del Hotel Alixares.