Iglesia de San Fiz de Baños, pequeño templo de piedra en cuyo interior todavía se conserva el suelo original de madera, así como los confesionarios policromados semiadosados a los muros, destaca su pórtico con dos columnas con capiteles historiados, uno representa el hambre y otro, la sed, y el retablo de 1647 de estilo manierista en el que aparece representada la Virgen del Carmen. En su exterior, destaca la escalera de piedra que sirve de acceso a la espadaña y un reloj solar datado de 1799 con una inscripción en latín.