Cada vez es más difícil desconectar. Una de las posibles causas es la dependencia de la tecnología día y noche; entre el móvil, el ordenador y otros dispositivos parece que las obligaciones profesionales y personales no acaban nunca. Realmente, para poder concederte un descanso de verdad lo primero que debes hacer es apagar todas las pantallas y dedicarte, al menos durante unos días, a vivir dedicándote a conectar contigo mismo, con tus seres queridos y con el entorno.
Además de que vayas con la conciencia de que esos días, aunque sean pocos, sean días para descansar y alejarte del estrés, será muy importante escoger el tipo de vacaciones adecuadas y, claro, un buen alojamiento. Te recordamos que puedes aprovechar las ventajas de My Barcelò para organizar esas vacaciones soñadas y disfrutar también del descuento.
¿Cómo conseguir pasar unas vacaciones relajantes?
En primer lugar, es muy importante que escojas un destino que de antemano te resulte relajante. Si, por ejemplo, planeas ir a Nueva York pero el tráfico y el bullicio de la ciudad te estresan, ¡mejor haz ese viaje en otro momento de tu vida! Quizá un destino en una playa desierta, o en un paraje natural en la montaña, o en un pueblecito tranquilo con gente apacible y donde la vida discurre sin prisas será una mejor idea.
El plan de tu vacación es la tranquilidad. Por eso, no llenes la agenda con mil excursiones para verlo todo y con mil eventos, ¡reduce el ritmo!
Haz alguna actividad física que te ayude a relajar los músculos. No tiene que ser necesariamente algo que requiera demasiado esfuerzo o que sea arriesgado, como alpinismo, paracaidismo o submarinismo; bien puede valer senderismo o montar en bicicleta.
Mímate, desde la ducha matinal al desayuno y al resto del día. Disfruta de cada actividad, sin prisas, y viviendo el presente. Olvídate de todo lo demás.
Concédete la posibilidad de improvisar. Actualmente controlamos todo, solo vamos a algún lugar con cita previa y si lo hemos anotado en la agenda. Durante estas vacaciones date el lujo de improvisar algo si te lo pide el cuerpo. ¿Por qué no?
¿Qué alojamiento escoger?
De nuevo, debes planificar un viaje a tu medida y para relajarte. Te damos distintas opciones, pero deberás escoger aquella que sepas que podrá ayudarte a desconectar y relajarte del mundanal ruido.
Hotel con SPA y masajes. Esta es una gran opción para dedicarte en cuerpo y alma a cuidarte. Podrás concederte un rato cada día de tu estancia para una sesión de SPA que sin duda te sentará de maravilla para recargar las pilas y desconectar.
Hotel con todo incluido. Esta opción es muy válida si pretendes quedarte en un único lugar, disfrutando de un entorno
natural, como puede ser una playa del Caribe o en un balneario o en un hotel en las montañas.
Camping. Si además de unos días de relax quieres romper con alojamientos tradicionales, puedes ir a un camping y alojarte en una caravana o bungalow. Especialmente recomendable si vas en familia, porque podéis pasar unos días muy especiales.
Alquiler vacacional. Puede ser un Airbnb o una casita rural en un paraje natural, para disfrutar de buenos paseos, de vida sin horarios, de una buena lectura, de charlas y de gastronomía local. Puedes ir en pareja, con la familia o con amigos bien allegados.
Las opciones para unas vacaciones relajantes son muchas. No es necesario que te desplaces muy lejos si no tienes la posibilidad. Los ingredientes que no pueden faltar son tu actitud y tus ganas; todo lo demás son detalles. Entonces, ¿para cuándo tus próximas vacaciones de relax?