Las tierras de la Ría de Muros y Noia están comunicadas, en buena parte, por majestuosos puentes. El principal en la villa es el Puente Grande, de sillería del siglo XIX. Está compuesto por arcos rebajados de tres centros y seis vanos con luces de 16 m cada uno. Cabe destacar que las reformas a las que se sometió modificaron notablemente el aspecto inicial de la construcción, a la vez que redujeron el número de arcos.