Qué ver en Salamanca

Qué ver en Salamanca. Si tienes pensado hacer turismo por esta capital castellano-leonesa, la guía sobre los 10 lugares imprescindibles que visitar, que te proponemos a continuación, te resultará de gran ayuda. No te perderás nada importante de una de las ciudades universitarias más atractivas de toda Europa, siendo la cuarta más antigua, por detrás de Bolonia, Oxford y París.

Epicentro de la cultura y saberes, cuna de los derechos humanos y de la soberanía popular; pasear por su centro histórico te permitirá viajar en el tiempo. Así como, descubrir el importante papel que jugó, entre finales del siglo XV y principios del XVI, en la vida económica, política y filosófica. Esto gracias a los conceptos planteados por los pensadores que confluyeron en aquella época, que formaron parte de la llamada Escuela de Salamanca.

Docta, culta, sabia, noble, leal, caritativa y hospitalaria son algunos de los calificativos bajo los que siempre ha sido conocida. Aunque como dice el refrán, «Salamanca no hace milagros, el que va jumento no vuelve sabio», lo cierto es que, si te decides a conocerla, estamos seguros de que disfrutarás de una experiencia enriquecedora. Además, tendrás la oportunidad de probar uno de los jamones ibéricos más exquisitos de toda España.

Razones por las que viajar a Salamanca

Motivos por los que viajar a la capital charra hay tantos como puedan llegar a pasar por tu cabeza. Nosotros vamos a empezar a responder a la pregunta «¿qué ver en Salamanca?» con la selección que te prometíamos en las primeras líneas de este artículo.

Qué ver en Salamanca. Plaza Mayor

Se sitúa en el corazón del casco antiguo y fue construida entre 1729 y 1756 por Alberto de Churriguera. La plaza es de estilo barroco español y tiene forma de cuadrilátero imperfecto. En ella, llaman la atención sus arcos de medio punto y algunos edificios, como el Ayuntamiento, la centenaria cafetería Novelty, el pabellón Real o los de San Martín y Pretineros.

Plaza Mayor Salamanca

También, no te pierdas los medallones situados sobre estos arcos, que representan a antiguos reyes y a personajes ilustres de la ciudad. Un espacio urbano que, con el tiempo, se ha convertido en el centro de la vida social, donde conviven locales, estudiantes, turistas y donde siempre encontrarás un gran ambiente.

Plaza Mayor Salamanca

Casa de las Conchas

Qué ver en Salamanca. Este palacio señorial, de estilo gótico tardío y con elementos del plateresco renacentista, se construyó entre 1493 y 1517 por encargo de Rodrigo Maldonado de Talavera. En su fachada, podrás apreciar, además, otros detalles de corte mudéjar.

Casa de las Conchas Salamanca

En ella, destacan, principalmente, las más de 300 conchas dispuestas a tresbolillo, que dan nombre a la casa. Según cuenta una leyenda, debajo de cada una de ellas, están escondidas las joyas de sus antiguos propietarios. Merece la pena que accedas a su interior para ver su bonito patio con arcos mixtilíneos, la escalera y el artesonado.

Casa de las Conchas Salamanca

Qué ver en Salamanca. Universidad de Salamanca

Fue fundada en 1218 por Alfonso IX y está considerada como la más antigua del mundo hispano. La fachada exterior de este histórico edificio es de estilo plateresco y está llena de elementos decorativos tallados en piedra, entre los que destaca una rana sobre una calavera. La superstición indica que has de localizarla y mirarla para poder aprobar tus exámenes.

Universidad de Salamanca

Por la Universidad han pasado personajes de la talla de Hernán Cortés y han dado clase figuras de nuestra literatura como Miguel de Unamuno. Te recomendamos que accedas al edificio de las Escuelas Mayores y, también, al de las Escuelas Menores para contemplar la pintura El cielo de Salamanca.

Universidad de Salamanca

Palacio de la Salina

Qué ver en Salamanca. Uno de los edificios que no te puedes perder, si decides viajar a Salamanca, es el palacio de la Salina, construido en 1538 por el arquitecto Rodrigo Gil de Hontañón. Fue sede del estanco de la sal hasta 1870, de ahí su nombre.

Palacio de la Salina Salamanca

Esta mansión señorial, de estilo plateresco con elementos italianos, cuenta con una airosa fachada, decorada con medallones; y un patio interior de dos alturas, que se sostiene con arcos y donde resaltan elementos decorativos en capiteles y ménsulas. Es conocido, también, como el palacio de don Rodrigo de Messía o el palacio de Fonseca. 

Palacio de la Salina Salamanca

Torres de La Clerecía

No puedes marcharte de Salamanca sin haber subido la Scala Coeli (escalera al cielo), como también se conoce. Desde este mirador, obtendrás las mejores vistas del centro histórico de la ciudad. El edificio, que hoy alberga a la Universidad Pontificia de Salamanca, te permitirá descubrir la historia del Colegio Real de la Compañía de Jesús.

Torres de La Clerecía Salamanca

Se comenzó a construir en 1617, por orden de Margarita de Austria y Felipe III, y está situado frente a la Casa de las Conchas. Cuenta con una iglesia con una fachada de tres cuerpos, en cuyo interior, puedes visitar la Sacristía y contemplar el Retablo Mayor.

Torres de La Clerecía Salamanca

Catedral

Una de las cosas que más llaman la atención de Salamanca es el hecho insólito de contar con dos catedrales. Por un lado, la Catedral Vieja, dedicada a Santa María de la Sede y en la que sobresale la Torre del Gallo. Empezó a construirse en la primera mitad del siglo XII y es de estilo románico de transición.

Catedral Salamanca

Por otro lado, la Catedral de la Asunción de la Virgen, llamada popularmente Catedral Nueva, que inicialmente iba a sustituir a la vieja. Se empezó a construir en 1513 por el arquitecto Rodrigo Gil de Hontañón y mezcla los estilos gótico tardío, renacentista y barroco. Es la segunda más grande de España y sorprende por su campanario de 110 metros de altura. En su fachada exterior, conocida como Puerta de Ramos, podrás observar numerosos elementos tallados en piedra, entre los que sorprenden un astronauta y un dragón tomando un helado. Desde el muro sur, accederás directamente a la Catedral Vieja.

Catedral Salamanca

Convento de Las Dueñas

Qué ver en Salamanca. El convento de Santa María, más conocido como Las Dueñas, se fundó en 1419 por Juana Rodríguez Maldonado y pertenece a la orden de las dominicas. En sus dependencias, aún se conservan algunos restos de un palacio mudéjar de finales del siglo XIV.

Convento de Las Dueñas Salamanca

En 1533, se levantaron el claustro y la iglesia, construcciones sobrepuestas en lo que ya estaba edificado. El templo es obra del dominico fray Martín de Santiago y cuenta con una sola nave, cubierta por siete bóvedas de crucería con terceletes. Es de estilo gótico, si bien está rematada por un ábside con un retablo barroco. La fachada exterior de la iglesia destaca por su sobriedad y por su portada plateresca.

Convento de Las Dueñas Salamanca

Qué ver en Salamanca. Convento de San Esteban

Otro de los reclamos de Salamanca que no debes dejar de visitar. Este convento dominico, situado en la plaza Concilio de Trento, fue construido entre los años 1524 y 1610 por iniciativa del cardenal fray Juan Álvarez de Toledo, en el solar de otro convento primitivo, donde llegó a alojarse Cristóbal Colón.

Convento de San Esteban Salamanca

En su edificación, participaron fray Martín de Santiago, Juan Ribero de Rada, Pedro Gutiérrez y Rodrigo Gil de Hontañón, aunque la planta y el diseño son de Juan de Álava, quien comenzó con las obras. Se considera de estilo plateresco, aunque combina detalles del gótico tardío y el barroco. Si decides acceder a su interior, te impresionarán rincones como la sacristía, el retablo mayor, el coro o la escalera de Soto.

Convento de San Esteban Salamanca

Palacio de Monterrey

Qué ver en Salamanca. Alonso de Zúñiga y Acevedo Fonseca, III conde de Monterrey, mandó levantar en 1539 esta construcción, que es uno de los máximos referentes del estilo plateresco. La imagen suntuosa de este palacio inacabado simboliza la nobleza del Siglo de Oro. No en vano, fue un edificio muy admirado en el siglo XIX, dando lugar al neoplateresco, también llamado estilo Monterrey.

Palacio de Monterrey Salamanca

Es una de las principales propiedades de la Casa de Alba y alberga numerosas obras artísticas, entre las que destacan dos cuadros de paisajes originales de José de Ribera. En 1929, fue declarado Monumento Histórico Nacional y, en 2018, tras un año de restauración, fue abierto al público como museo.

Qué ver en Salamanca. Torre del Clavero

Para cerrar esta lista, te recomendamos visitar este emblemático monumento, que forma parte de la casa señorial del clavero de la Orden de Alcántara. De planta cuadrada, la torre tiene una altura de más de 28 metros y termina en forma octogonal.

Torre del Clavero Salamanca

Los escudos de armas de los Sotomayor y Anaya, que coronan los tambores semicilíndricos que la adornan, plantean la duda de si fue construida por orden de Francisco de Sotomayor, en 1470, o fray Diego de Anaya. En 1931, fue declarada monumento nacional y dibuja una de las estampas más típicas de la ciudad.

Con este decálogo esperamos haber satisfecho tu duda sobre qué ver en Salamanca. La capital charra es perfecta para disfrutar del turismo cultural y, también, gastronómico. Además de los lugares imprescindibles que ya te hemos recomendado, no queremos que se nos queden en el tintero otros tan atractivos como la Casa Lis, el Puente Mayor del Tormes, el Palacio de San Boal o el Huerto de Calixto y Melibea. Este último, el escenario de los encuentros amorosos de los protagonistas de La Celestina, nombre con el que se hizo popular la archifamosa obra de Fernando de Rojas.

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