Puente Romano de Éntoma – O Barco de Valdeorras
Puente Romano de Éntoma, forma parte del Camino Real que une Sobradelo y O Barco. Fue construido con grandes piedras sin labrar en su base y con lajas de pizarra formando su único arco de medio punto.
Puente Romano de Éntoma, forma parte del Camino Real que une Sobradelo y O Barco. Fue construido con grandes piedras sin labrar en su base y con lajas de pizarra formando su único arco de medio punto.
Se estima que la construcción de este puente ubicado en el municipio ourensano de Baños de Molgas data del siglo II. Algunos siglos después (en el XIV) habría sufrido algunas reformas pero los expertos en arquitectura dicen que todavía puede verse en la parte baja del arco un almohadillado de los perpiaños, típicamente romano. Del siglo XX serían sus pretiles y el enlosado de la calzada.
El puente medieval de San Cibrán fue construido en la parroquia de Aldán, en el entorno del río Orxás. Cuenta con un solo arco, bóveda de sillería y calzada horizontal.
El puente internacional que une Tui con Valença se levanta sobre el río Miño y une desde 1886 las dos villas históricas de Galicia y Portugal.
En la parroquia de Santa Comba de Ridadelouro, y enmarcado en un bonito paraje boscoso, nos encontraremos con el puente de San Telmo, que constituye un ejemplar del barroco portugués en Galicia.
En el apacible municipio de Ponteceso podemos contemplar su famoso puente de cinco arcos.
Puente del siglo XV que atraviesa el río Traba rodeado de vegetación por todas partes conforma un paraje digno de cuento de hadas. Se construyó sobre otro puente por el que pasaba la vía romana que atraviesa Barbanza.
Enclavado en mitad de un espectacular paisaje, este magnifico puente que atraviesa el río Tambre uniendo las localidades de Outes y Noia fue construido durante el reinado de Alfonso IX y de ahí le viene su nombre. Las reformas medievales y la reedificación llevada a cabo entre 1842 y 1844 le dieron su aspecto actual
Este puente del arquitecto Álvaro Varela, vanguardista e innovador, nos ofrece unas maravillosas vistas de la ciudad desde la pasarela peatonal que alcanza una altura de 20 metros en su punto más alto sobre el río Miño. Además sus característicos cables tensados, los pilares inclinados y la ondulante línea de la pasarela producen un gran impacto visual.
Barrio preindustrial que, en 2011, ganó el premio COAG a la mejor rehabilitación de un espacio público. El objetivo de esta rehabilitación fue recuperar el entorno acondicionando dos puentes, una fuente y el lavadero junto al popular roble de A Chaínza y el adoquinado de la zona.